martes, 16 de abril de 2013

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miércoles, 10 de abril de 2013

Oxford, Strasford, Castillo de Warwick y despedida de Londres



Nuestro último día en Londres estuvo acompañado de una bonita excursión a Oxford, Stratford y el Castillo de Warwick. Se nos ha hecho muy corta la estancia, tanto que casi no dormimos para antes de coger la guagua visitar algunos lugares de la ciudad que debíamos volver a grabar. La mañana amaneció con bastante lluvia y a las 7 aún no había casi nadie por la zona de Picadilly Circus, ni las comerciales Oxford y Regent Street.




Con sueño pero con muchas ganas de conocer más tierra británica nos acercamos con puntualidad inglesa a Victoria Coach donde nos esperaba nuestra compañera de Welcome Incoming, la grancanaria Amor; que nos acompañó hasta el grupo de la excursión. Tuvimos de guía a Godofredo un guía muy simpático que nos trató de lujo y nos hizo sentir como en casa con sus bromas y puntualizaciones en español.




La primera parada fue Oxford. Una espectacular ciudad con gran belleza arquitectónica y en la que sobresale su universidad, College, con todo lo que conlleva y el espíritu universitario que se respira. Allí pudimos ver alguna localización usada para las películas de Harry Potter, muchísimas bicicletas, impresionantes tesoros arquitectónicos…















De allí a Stratford donde visitamos la casa natal de William Shakespeare. En esta ciudad, más pequeña y preciosas casas con tejado, se rinde homenaje al mejor dramaturgo británico. Algún compañero de grupo estaba bastante despistado y nos reímos bastante al no saber de quién era la casa cuando había carteles por todos lados y habíamos visto un vídeo antes jeje




La última parada de esta excursión, cortesía de TuBillete.com, fue el Castillo de Warwick. Hasta finales de los ’70 vivían los Duques de Warwick pero ahora se ha convertido en un castillo temático en el que podrás hacer un viaje en el tiempo para conocer la historia británica. Fue comprado por los propietarios de Madame Tussauds por lo que en su interior hay bastantes figuras de cera que sirven para contextualizar al visitante. Los niños, con espadas, escudos, arcos y flechas en las manos disfrutaban sin límites; aunque los más mayores también tienen su parte cultural. Recomendado para una jornada diferente y para toda la familia, como diría Arguiñano.










El viaje de vuelta hasta Londres, casi 3 horas, nos sirvió para una pequeña siesta y retomar fuerzas para nuestras últimas horas londinenses. No dudamos visitar, de nuevo, Picadilly Circus y en esta ocasión sí había el ambiente que nos tiene acostumbrado, el ritmo de vida londinense y aunque hacía más frío, al menos el agua nos dio una pequeña tregua. Tower Hill, Regent Street, Leicester Square, Westminster y Lambradge Bridge fueron las zonas que visitamos antes de unificar nuestro almuerzo y cena en un italiano. Hemos intentado siempre adaptarnos a las costumbres y día a día británicos, pero las comidas –la mayoría Fast Food-  no son su mejor carta de presentación. Mañana, ya saben familia, comida rica de dieta mediterránea y evitar fritos, que valga la redundancia, estamos fritos de tanto fritos jejeje ¡Y para colmo caro!



Nos vamos con pena, con la lástima de que se nos ha hecho muy corta la estancia y nos han faltado cosas que grabar. Pero Londres es mucho Londres, así que nos tocará una reválida londinense. Por el momento, vamos a descansar porque a las 7 nos vendrán a buscar para volver a Tenerife. Cuando lleguemos, nos pondremos manos a la obra para poder enseñarles nuestra aventura en vídeo y complementar este blog en el que cada día hemos intentado acercarles nuestra visión de Londres; y sí, también realizar los sorteítos jeje 

See you London!

martes, 9 de abril de 2013

Los ingleses nos dejan de cera


Este lunes volvimos a disfrutar de la zona centro de Londres. Fue nuestro tercer día para conocerla y sin duda, se nos va a hacer escasa la estancia en la capital británica. Trípode en mano y ritmo londinense nos recorrimos todos los museos que pudimos a velocidad de crucero. Comenzamos con el “Madame Tussauds”, de los pocos que se debe abonar entrada pero que sin duda merece la pena. Nosotros disfrutamos como niños gracias a la cortesía de TuBillete.com.




Allí pudimos ver las réplicas hechas de cera de famosos actores, deportistas, políticos y otras personalidades. Sin pararnos en los detalles porque no hay minuto que debamos dejar escapar en esta gran metrópoli, pasamos por las diferentes salas temáticas y también aprovechamos los espectáculos que tienen en su interior: una gruta del miedo, un viaje por la historia londinense y una atracción 4D de los superhéroes que salvan Londres. Sin duda, el Madame Tussauds vale lo que cuesta su entrada y es un museo ideal para todas las edades y en el que disfrutar durante horas.


De allí nos dirigimos a Candem Town donde se encuentra uno de los mejores –o el mejor- mercado de Londres. Al menos, el que más puede sorprenderles. En este barrio lo común se vuelve diferente y viceversa. Los piercing, crestas, tatuajes y varias tonalidades extravagantes de color del pelo son lo habitual, siendo un fiel reflejo de la riqueza cultural londinense. Antes de volver de museos quisimos comprar un tardío almuerzo, pero tuvimos un contratiempo con el restaurante.


La oferta de museos gratuitos en Londres es muy amplia y nos decidimos por acudir al Británico y el de La Naturaleza. En el primero nos prohibieron grabar, y en el segundo volvieron a ponernos problemas del uso del trípode; incluso con malos modales. Y es que se nota la ausencia de habilidades sociales en esta sociedad tan impersonal y en que parece que todo es ilegal. También en el metro nos dijeron que estaba prohibido grabar por motivos de seguridad antiterrorismo.


 



Cada vez más rendidos, pero sabedores que tenemos mucho que grabar y poco tiempo porque mañana tenemos excursión a Oxford; nos fuimos al barrio de Notthing Hill donde se rodó la película; para posteriormente visitar a pie alguna zona que pasamos en coche en el Londres panorámico y sobre todo aprovechar las dos últimas atracciones que teníamos para disfrutar gracias a Welcome y TuBillete.com.
Comenzamos con varios sustos en el London Dungeon en los que Vero se agarró a mi mochila. La única condición, además de no grabar, es que ellos pueden tocarte para asustarte y tú no a ellos. Normal, porque seguro que más de uno se reviraba con tanto susto jejeje Hoy ha sido un día de mucho metro, el Tube cumple 150 años y en sus accesos, como siempre, nos alegraba el trayecto los músicos que tienen permitido tocar en zonas habilitadas.




Esta atracción está pegada al London Eye y como la otra vez nos encantó de noche, no lo dudamos. Subimos cuando las luces de la ciudad empezaban a encenderse, cuando el cielo se oscurece y deja una impresionante estampa cuando llegas a la zona alta de la mayor noria de Europa. Por la noche está más precioso que de día, sobre todo sabedores de que durante el día suele estar el cielo gris y si hay niebla no ves tanta extensión, aunque despejado puedes llegar a ver unos 40kms.  En la entrada, nos volvieron a poner muchísimas pegas –ya cansan- y no sólo el trípode, también nos quitaron los micrófonos, hasta casi nos querían quitar la cámara para subir. Después de más de media hora dialogando con los de seguridad, vino la encargada y nos dio acceso, en gran medida porque Fer le dijo que le habían hecho sentirse como un criminal y que parecía que más que material de trabajo eran armas. El pobre estaba ya cansado de tantos impedimentos, pero al final cedieron al preguntar si no era posible que subiese un reportero con su novia por vacaciones.


A pesar de todo, nadie nos quitó la gran experiencia de este giro de 30 minutos, totalmente recomendado, y en el que se ve una gran panorámica de Londres.  La rueda de la fortuna –como muchos la llaman por los ingresos que obtiene diariamente- es una atracción idílica en la que hasta se celebran bodas; y además se hacen reserva de cápsulas (cada uno de sus transportadores) que puedes reservar en fechas señaladas.




















La belleza de Londres es incalculable pero sólo le falta, generalizando, que su gente y su clima fuesen mejores para llegar a ser perfecta. Este martes, finalizaremos con otra excursión por los alrededores. Les dejamos los regalitos que sortearemos, ¿qué les parecen? Con tintes británicos ;)


¡NOS FALTAN DÍAS! Y es que Londres ofrece tanto, que se nos ha hecho el periodo muy escaso.